Necesito un poco de comprensión... espero encontrarla aquí.
Hace algún tiempo leí en una novela que la protagonista se imaginaba a sí misma sacando una escopeta de su bolso, y después disparaba con ella en la cabeza a otra persona, como si nada. Luego volvía a su rutina... Estoy aquí para decir que yo también me he imaginado eso.
Lo de la escopeta se me ha pasado por la cabeza, pero yo soy más de las que empuñan una pala o un hacha. Si, de esas enormes, con un mango de madera, de las que salen en las películas cuando excavan una fosa -en el caso de la pala-, o las mismas que suele portar algún tipo rudo partiendo leña para más tarde alimentar el fuego.
Me imagino a mí misma, empuñando cualquiera de estas armas, y golpeando con fiereza a mis blancos de desesperación.
Sonará muy macabro, pero incluso llego a ver en mis fantasías cómo sería rebanar sus cabezas, y tras llevar a cabo esta tarea, contemplar cómo un surtidor de sangre rezuma de sus cuellos. Al mili segundo esos individuos vuelven a tener la cabeza sobre los hombros.
En realidad yo soy una persona muy pacífica y para nada violenta. Pero admitámoslo... todos tenemos nuestros límites, y todos hemos deseado pagar nuestra frustración con alguien, especialmente si ese 'alguien' es el culpable de nuestra desesperación.
Os quiero.
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